Coca-Cola apuesta por el uso de plástico reciclado. De esta manera avanza en su estrategia de realizar envases más sostenibles que reduzcan la contaminación por plástico.

Cada vez hacen más uso de materiales reciclados que tienen menos efectos en la contaminación. Por ello, ahora las botellas que contienen bebidas sin gas y zumos son fabricadas con un 50% de PET reciclado en sus producciones España y Portugal.

El rPET, conocido también como PET reciclado, es un tipo de plástico. Es utilizado para fabricar botellas, frascos y ropa creada con poliéster reciclado. Se puede reciclar en su totalidad. Sus ventajas son un menor impacto en el medioambiente , genera menos deshechos y emisiones tóxicas y la necesidad de una menor extracción de petróleo para la producción del plástico. Además impulsa la economía circular y la sostenibilidad.

El plástico reciclado reduce la contaminación

Con esta campaña de reciclaje de plástico, la multinacional avanza en su objetivo de un planeta donde no haya residuos y reducir sus emisiones. Quiere alcanzar su objetivo de neutralidad de carbono para el año 2040. Para ello, invierten en tecnologías de innovación que les permita eliminar la cantidad de plástico innecesaria o cuyo reciclaje no sea fácil.

El uso del PET reciclado deja en el planeta un 70% menos de huella de carbono. Esta acción supone un ahorro al año de 2.000 toneladas de plástico virgen utilizado, disminuyendo 240 toneladas de CO2 en ambos países. 

Su objetivo es lograr que las botellas sean creadas a partir de materiales 100% reciclados y renovables, reduciendo así el uso de nuevos plásticos y la contaminación que la obtención y manipulación de estos conlleva. 

También impulsan su iniciativa de dar una nueva vida a las botellas y latas tras ser utilizadas. Para ello, se comprometen a que todos los envases que sean venidos se recojan y reciclen para el año 2025.